Érase una vez, en una isla mágica llamada Santorini, dos viajeros que coincidieron por azar. Entre risas y atardeceres, nació un amor que ya no conoció fronteras. Desde aquel instante, sus caminos se unieron…
En Santorini, cada uno viajaba por su cuenta. A través de Couchsurfing encontramos otros viajeros cerca y terminamos compartiendo auto con otro chileno. El viaje fue ligero y lleno de conversación, como si nos conociéramos de toda la vida. El primer día me animé a tomarle la mano, y al segundo, él me regaló un beso. Después me siguió a Madrid, más tarde yo lo visité en Antibes y conocí a su familia. Poco después estaba volando de regreso a casa, a Chile, con la sensación de que algo muy grande acababa de comenzar.
Pacto de Solidaridad Civil (PACS) [fr] El PACS es un contrato entre dos adultos, de distinto sexo o del mismo sexo, para organizar su vida en común. Después de vuelos cancelados por la pandemia y un año de relación a distancia, la vida nos regaló una segunda oportunidad. Gracias a un laissez-passer creado para parejas de distintos países, finalmente pude entrar a Francia. Tras tres meses viviendo juntos en Antibes, nuestra historia se volvió oficial con un PACS, el primer gran paso de nuestra vida en común. Desde entonces, supimos que no habrían fronteras capaces de separarnos.
Después de un accidente en el tobillo, haciendo trekking en Patagonia, me quedé casi un año allá, con todo lo que eso significaba para nuestra relación. Regresé a Francia sin saber qué pasaría a continuación, con dudas y miedos. Pero la vida nos sorprendió otra vez: Nico organizó un viaje para celebrar nuestro quinto aniversario en Egipto. En Asuán, navegando en una felucca, bajo el cielo de Horus y el río Nilo eterno de Hapi, se puso de rodillas y me pidió matrimonio. Ese instante cambió todo: la certeza de que nuestra historia recién comenzaba.
